J. Sorolla y Bastida
Madre
¿1895?-1900
Óleo sobre lienzo 125x169
Madrid
Instante de luz que a la luz llegas
Ráfaga de felicidad eterna
Espacio que creas al
Nacer
Estás - ya - aquí !
Un instante... Sorolla vuelve a crear un efímero y eterno instante... como el de una estrella fugaz que pasa y que apenas ves, apenas sientes, pero clava en ti un racimo de luces. Clotilde que se asoma de la pureza con su sueño... y María se despierta a sus primeros sueños... un instante que emerge de un espacio tácito entre linos de levante...
Irene...
eres el instante de luz que alumbra la nueva historia,
ráfaga de felicidad eterna...
hoy eres tú el espacio, el instante,
la pincelada de vida que dibuja sonrisas en tu madre...
Irene...
hoy eres el ya deseado, el romper de la lógica...
hoy eres el sueño esperado, el adviento encarnado...
bálsamo que cura las heridas
consuelo de mustias caídas...
Irene...
esta fria noche, la luna ha abierto su papel de regalo,
y en tu suave piel ha derramado la PAZ
[.,.,porque Irene eres paz .,.,]
paz y calma, sabor y luz, pilar, motivo, fuerza, vida y energia...
hoy en ti se recrea la lírica de libertad y de amor encarnado...
Hoy... Irene...
eres las sensación indescriptible que se balanceaba
entre los límites del miedo y la felicidad...
eres la lírica encarmenada en el milagro de la vida...
Hoy Irene...
y para siempre... como cada hojita nueva...
hoy tú sintetizas el afan de una madre
haces que ella sea primavera...
Hoy Irene... hoy... has llegado
estás aquí...
cierra los ojos y duerme
sueña y siente la piel dulce de quien te arropa
que en tí se hace más mujer y para siempre madre...
Bienvenida, Irene... portadora de Paz...
hoy has llegado.,.,.,.,.,.,.,.,.,.,.,.,.,.,.,.,.